Yo te busco, más que a todo, te he encontrado, mi Dios amado. Qué bueno es andar detrás de ti mi Jesús.
Yo te busco, más que a todo, te he encontrado, mi Dios amado. Qué bueno es andar detrás de ti mi Jesús.
Qué bueno es, estar en tu presencia. Que precioso es estar a tu diestra. Mi poderoso que me da la fuerza, para que siga vivo en esta tierra. Es que sin ti yo no puedo vivir, mi corazón de jara de latir, si tú no estas aquí junto a mí, no durare un segundo yo aquí. Yo lo que quiero es vivir a tu lado, para decirte mi Dios que te amo. Y darte gloria con coros y cantos, y repetir que por siempre eres santo. Quiero buscarte con todo el deseo, y arrodillarme y decir que eres bueno. Solo en ti he encontré lo que quiero, la dulce paz que anhelaba y por eso.
Yo te busco, más que a todo, te he encontrado, mi Dios amado. Qué bueno es andar detrás de ti mi Jesús.
Yo te busque, cuando era de noche, Mi corazón solo era un derroche, Lloraba mucho en mi cama en las noches, y hasta quería que un carro me choque. Yo no quería ya seguir viviendo, porque pensaba que ya era mi tiempo, porque mi vida solo era un desierto, y no sabía que ya estaba muerto. Hasta que un día llego la alegría, cuando a mi puerta toco el mecías, El me llevo Asia un agua cristalina, y me lavo allí todas las heridas. Que me causó este mundo de mentiras, donde tu vida no tiene alegría, si no buscas del que da la salida, en este lodo quedaras tú sin vida. Busca de Cristo que hoy queda tiempo, búscalo ahora que llego ya tu tiempo, Si tu escuchas lo que estoy diciendo, veras que es cierto te estoy advirtiendo. No te detengas y sigue corriendo, ben acercarte y recibe al maestro, y ya verás que ya pasa el lamento, solo confía y búscalo todo el tiempo. Quiero por siempre quedarme a tu lado, y bendecir tu nombre Dios amado, tú me has librado de este mundo malo, y por eso me quedado a tu lado. Yo me alegro cuando estoy contigo, cuando en tus sendas de tu luz camino, eres mi fuerza también mi destino, y para siempre estaré en tus caminos.
Yo te busco, más que a todo, te he encontrado, mi Dios amado. Qué bueno es andar detrás de ti mi Jesús.
Yo te busco, más que a todo, te he encontrado, mi Dios amado. Qué bueno es andar detrás de ti mi Jesús.