Quiero estar dentro de tu cabeza, ir descubriendo
porqué hay tanta belleza. Y decirte al oído
lo que me está pasando.
Ni siquiera he visto aún una sonrisa, y sé que dentro de tí hay una que es mía. Y decirte al oído
que estoy aquí, y que somos elegidos.
No tengo prisa por oir un sí, que diga ahora
ya no nos separamos. No tengo prisa por verte aquí, prefiero sólo pensar que algo ha nacido en mí.