Está gritando,
ya se que no llora,
Su corazón y sus tripas volando,
Pero a donde va,
¿me está gritando?
Que hay de su culo
¿qué habíamos quedado?
La noche empieza y con ella destripo
lo busco a solas con mi mejor cuchillo
Pero ¿dónde está?
¿Qué es lo que ha pasado?,
¿Qué es lo que queda después de tantos años?
Miro esos ojos que un día eh sacado,
Busco su boca, sus manos y sus zapatos
que quedaron por el suelo
Y se han arruinado de mugre
Ni una sola patada
ni golpes, ni fajadas apasionadas,
Ni rastro de los golpes
que antes te daba hasta el amanecer.
Ni una de las tristezas,
por las que cada noche y todos los días
Arrancan esos ojos
En los que ahora no ves.
Como un juguete que choco contra un muro,
salgo a golpearte y me aburro en cuanto mato,
Una oportunidad, un vago, un mestizo,
Volverme flaco y tu gordo conmigo.
Frente a los ojos que un día he sacado
Pongo mi espada y algunos cuantos garzos,
Y apunto otra matanza,
Mientras mi boca dice nunca más.
Ni una sola patada
ni golpes, ni fajadas apasionadas,
Ni rastro de los golpes
que antes te daba hasta el amanecer.
Ni una de las tristezas,
por las que cada noche y todos los días
Arrancan esos ojos
En los que ahora no ves.
No puede ser,
no sos vos,
Me pesa tanto tu corazón,
Por no ser de sangre cuando el infierno,
Me pide paciencia.
Ni una sola patada
ni golpes, ni fajadas apasionadas,
Ni rastro de los golpes
que antes te daba hasta el amanecer.
Ni una de las tristezas,
por las que cada noche y todos los días
Arrancan esos ojos
En los que ahora no ves.