Quiero una rosa y un atardecer, que jamás se pueda oscurecer el veneno que esconde tu piel para siempre me dé de beber
Fui tu esclava porque quise, y en el fondo querías que así fuera, me embriagué de ti porque quise que de mi alma tan solo bebieras
Me olvidaste porque quise que lo hicieras todo a mi manera, malcrié nuestro amor porque quise, quise tanto que me quede fuera
Y entonces tú de quien estabas enamorado, por quien temblabas sobre mi almohada, por quien lloraste al marcharme, y me quede esperando una respuesta con el alma siempre puesta
Y me quedé
Con el sol de noche y la luna de día
Con la pasión helada y la rabia escondida
Con esas locas ganas de amarte
Llenas de polvo en cualquier rincón
Sigo regando la semillita que me plantaste en el corazón
Y me quedé
Con el sol de noche y la luna de día
Con la piel olvidada y las manos vacías
Con sueños rotos por los rincones
Y en los cajones cartas de amor
Sigo regando la semillita que me plantaste en el corazón
Quiero una rosa y un atardecer, que jamás se pueda oscurecer el veneno que esconde tu piel para siempre me dé de beber
Con la lluvia te marchaste, y contigo se fueron las flores, nunca mas regresaste a mi vera, ni regresaron las primaveras
Y no se tú, pero yo vivo de los recuerdos y cada vez que hago algún intento siempre comparo tu amor, y me quede esperando una respuesta con el alma siempre puesta
Y me quedé
Con el sol de noche y la luna de día
Con la pasión helada y la rabia escondida
Con esas locas ganas de amarte
Llenas de polvo en cualquier rincón
Sigo regando la semillita que me plantaste en el corazón
Y me quedé
Con el sol de noche y la luna de día
Con la piel olvidada y las manos vacías
Con sueños rotos por los rincones
Y en los cajones cartas de amor
Sigo regando la semillita que me plantaste en el corazón
Quiero una rosa y un atardecer, que jamás se pueda oscurecer el veneno que esconde tu piel para siempre me dé de beber (bis)