Ni tú bordas pañuelos,
Ni yo rompo contratos,
Ni yo mato por celos,
Ni tú mueres por mí.
Antes de que me quieras,
Como se quiere a un gato,
Me largo con cualquiera,
Que se parezca a ti.
De par en par te abro,
Las puertas que me cierras,
Me cuentan que el olvido,
No te sienta tan mal.
La paz que has elegido,
Es peor que mi guerra,
Aquella cama nido,
Parece un hospital.
Yo en cambio no he sabido,
Ir a favor del viento,
Que muerde las esquinas,
De esta ciudad impía.
Pobre aprendiz de brujo,
Que escupe al firmamento,
Desde un hotel de lujo,
Con dos camas, vacías.
Quién hará mi trabajo,
Debajo de tu falda,
La boca que era mía,
De que boca, será.
El roto de tu ombligo,
Ya no me da la espalda,
Cuando pierdo contigo,
Lo q gano al billar.
Aunque nunca me callo,
Guardo un par de secretos,
Lo digo de hombre a hombre,
De mujer a mujer.
Ni me caso con nadie,
Ni guardo pa mis nietos,
Por no tener no tengo,
Ni edad de merecer.
Como pago al contado,
Nunca me falta un, beso,
Siempre que me confieso,
Me doy la absolución.
Ya no cierro los bares,
Ni hago tantos excesos,
Cada vez son más tristes,
Las canciones de amor.
Ya no cierro los bares,
Ni hago tantos excesos,
Cada vez son más tristes,
Las canciones de amor.