Lo bello de mirarte es sentirme tu dueño, como el niño que construye su castillo. Sólo mirarte es lo bello.
Cuando te tengo cerca eres como gaviota, que volando va buscando a su interés, algo que llevarse a la boca.
¿Cómo decirte que vuelo en silencio?, ¿cómo decirte que muero en tu boca? En los lejanos lugares me pierdo, con tu simpleza coqueta y hermosa.
Sobre tu piel, entre tu pelo y tu voz, sigo buscando el rincón que guarda el secreto, que guarda el secreto de tu corazón. De tu corazón, niña, de tu corazón.
A veces se equivocan besos que tiran flechas,
y sin poder evitarlo, te enamoras de aquellas rosas con cadenas.
Me marcho de viaje, y a un escalón tan sólo, con mil maletas a rebozar de besos. Y sigo sin encontrar el tesoro, mi tesoro.
¿Cómo decirte que vuelo en silencio?, ¿cómo decirte que muero en tu boca? En los lejanos lugares me pierdo, con tu simpleza coqueta y hermosa.
Sobre tu piel, entre tu pelo y tu voz, sigo buscando el rincón que guarda el secreto, que guarda el secreto de tu corazón, de tu corazón.
Sobre tu piel, entre tu pelo y tu voz, sigo buscando el rincón que guarda el secreto de tu corazón.
Sobre tu piel, entre tu pelo y tu voz, sigo buscando el rincón que guarda el secreto de tu corazón.