Justamente ahora
Irrumpes en mi vida,
Con tu cuerpo exacto y ojos de asesina.
Tarde como siempre,
Nos llega la fortuna.
Tú ibas con él,
Yo iba con ella,
Jugando a ser felices por desesperados,
Por no aguardar los sueños,
Por miedo a quedar solos.
Pero llegamos tarde,
Te vi y me viste,
Nos reconocimos enseguida,
Pero tarde.
Maldita sea la hora
Que encontré lo que soñé,
Tarde...
Tanto soñarte y extrañarte sin tenerte,
Tanto inventarte,
Tanto buscarte por las calles como un loco,
Sin encontrarte.
Y ahí va uno de tonto;
Por desesperado,
Confundiendo amor con compañía.
Y ese miedo idiota de verte viejo y sin pareja,
Te hace escoger con la cabeza lo que es del corazón.
Y no tengo nada contra ellos,
La rabia es contra el tiempo
Por ponerte junto a mí,
Tarde...
Ganas de huir,
De no verte ni la sombra,
De pensar que esto fue un sueño o una pesadilla,
Que nunca apareciste,
Que nunca has existido.
Ganas de tocarte,
Ganas de besarte,
De coincidir contigo,
Y amarrarte en un abrazo,
De mirarte a los ojos
Y decirte bienvenida.
Pero llegamos tarde,
Te vi y me viste,
Nos reconocimos enseguida,
Pero tarde.
Quizás en otras vidas...
Quizás en otras muertes...
Con ganas de tocarte,
Con ganas de rozarte
De coincidir contigo y golpearte con un beso,
De fugarnos para siempre,
Sin daños a terceros...